¿Dónde está Laponia?
Dónde está Laponia – La casa de Papá Noel
Laponia, sin lugar a dudas, es uno de los lugares más increíbles de nuestro planeta y se encuentra a tan sólo doscientos kilómetros del Círculo Polar Ártico. Ya solo volar sobre la zona donde se encuentra Laponia es un espectáculo visual disfrutando de un inmenso territorio plagado de lagos y nieve, pero ¿Dónde está Laponia?.
Pero ¿Dónde está Laponia? Laponia es un área escasamente poblada, unos 180.000 habitantes en sus 100.366 km² (92.667 km² de tierra y 7.699 km² de agua), que se encuentra en la región más septentrional de Finlandia en el norte de Europa, ocupando el 40% de la superficie de Finlandia con tan solo el 3,6% de la población del País. Es famosa por su vasta naturaleza subártica, los centros de esquí y los fenómenos naturales, incluidos el sol de medianoche y la aurora boreal.
La capital administrativa es Rovaniemi, es la vía de acceso a la región. Es la tierra del pueblo indígena Saami, que se extiende a los países vecinos, y tiene su centro en el lejano norte.
Finlandia y más concretamente la Laponia finlandesa es soñada por niños y mayores ya que constituye uno de los mejores viajes que se pueden hacer en invierno, ya que es en Rovaniemi donde Santa Claus, Joulupukki en finés, pasa las navidades y desde donde se reparte la magia a todo el mundo el 25 de Diciembre. Es muy emocionante poder entregar a Santa Claus su carta en persona en lo que es Santa Claus Village.
Aquí encontramos el péndulo que permite a Papa Noel llegar a todos los lugares del mundo en una sola noche. Los más pequeños podrán ver a los elfos trabajando, hornear galletas de Navidad (las tahtitorttu) y hasta conocer a Mama Noel (porque sí, Papa Noel está casado). Los papis mientras tanto pueden entretenerse visitando el museo dedicado a la Navidad, en el que se expone cómo se celebra esta fiesta a lo largo y ancho del mundo. Por derecho propio no nos extraña que este se haya convertido en el lugar más visitado de Finlandia.
Laponia te ofrece experiencias de lo más interesantes, como dormir en cabañas de árboles o en hoteles de hielo. Podrás montar en motos de nieve, montar en trineos de renos y perros, bañarte en una sauna, ver un barco rompehielos como el Sampo on the Arctic e incluso esquiar. Pero no hay nada, nada que se compare a estar ante una aurora boreal. ¡¡A ver si hay suerte!!
En Finlandia en verano practicamente no se pone el sol, pero en invierno ocurre justo lo contrario, apenas hay tres o cuatro horas de luz al día. Es el momento idóneo para las auroras boreales en los meses de Diciembre a Marzo.
TRADICIONES Y COSTUMBRE
En un país tan septentrional las condiciones de la vivienda son de suma consideración y parte importante de las ocupaciones del día, casi todas las actividades se hacen en las viviendas o en las inmediaciones de éstas. Su carácter es generalmente serio, de pocas palabras, se busca la efectividad sobre todo, esto naturalmente está intensamente influenciado por su resistencia y la supervivencia en condiciones extremas. Pero no se deje engañar, aunque parecen un poco retraídos, se interesan mucho en saber la opinión sobre ellos que tienen los demás. Les gusta mucho internet y las tecnologías de comunicaciones, no en vano pasan mucho tiempo en casa.
Una de las prácticas más extendidas es la de la sauna. La sauna es algo sagrado para ellos, que podríamos comparar con la ceremonia del té para los japoneses.
La Navidad es la gran festividad de Laponia, y no podía ser de otra forma sabiendo que es la tierra de Papa Noel, Santa Claus. De acuerdo con la tradición, San Nicolás era un sacerdote generoso que hacia ofrendas a todo el país y acabó siendo obispo. Su leyenda se extendió hasta tal punto que básicamente todo el planeta festeja su llegada, pero en ningún lugar como en su pueblo de origen: Rovaniemi.
Cuando acaba esta tradición, se empieza con los villancicos que dan paso al resto de festejos: saunas de navidad, decoración de abetos, copiosas cenas navideñas, la apertura de los calendarios de navidad de chocolate, la lectura de la declaración de paz de navidad en Turku, visita a los cementerios adornados para la oportunidad con velas y coronas de flores y, desde luego, la llegada de San Nicolás.
El otro enorme festejo de Laponia, cuya tradición es incluso anterior a la Navidad, es el solsticio de invierno; el Beiwe, la diosa de la fertilidad, la primavera, el Sol y la Cordura. Hablamos de la fiesta que celebran los lapones de Noruega en la noche más corta del año, a lo largo del solsticio de verano (o San Juan) siguiendo los pasos de una antigua leyenda que cuenta como la diosa Beiwe y su hija camina sobre huesos de reno en el cielo para que vuelvan a crecer las plantas en la tierra y proporcione pasto a los renos. De esta creencia ancestral nace el Festival de Beiwe.